Se inicia este mes de septiembre un nuevo curso político extremadamente complicado, con muchas incertidumbres, golpeado por la difícil situación internacional. Se reanuda la actividad política rumbo hacia las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo de 2023 y las generales, en principio previstas para otoño del próximo año. En los próximos nueve meses, la política aragonesa y la nacional se van a enfundar la camiseta electoral.
En Aragón, siguen abiertas algunas incógnitas. La principal, la que más interesa a la ciudadanía, la del presupuesto de la comunidad autónoma del próximo año, ya ha sido desvelada. El propio Javier Lambán y su consejero de Hacienda, Carlos Pérez Anadón, han dejado claro que habrá presupuestos, serán expansivos y se aprobarán antes del 31 de diciembre. Si se cumplen los pronósticos, serán los cuartos presupuestos del cuatripartito, sin duda una muestra de eficacia y de diálogo de una coalición inédita hasta esta legislatura y que se ha mostrado indestructible pese al covid y a los agoreros.
Sabemos también que Lambán optará a su tercer mandato consecutivo al frente de la lista del PSOE igualando la marca del también socialista Marcelino Iglesias. A Lambán no hay quien le tosa en su partido después de cuatro años complicados al frente del Pignatelli. Desconocemos, sin embargo, si al líder indiscutible del PSOE le acompañará Lola Ranera como candidata a la Alcaldía de Zaragoza. Esta semana Ranera ha anunciado que se presenta a las primarias de este mes de septiembre. Ha decidido dar un paso adelante que confirmaría que tiene atada su designación y que sigue contando con el respaldo de Lambán, después de semanas de especulaciones con nombres de posibles sustitutos, ya que la opción de Ranera no parece convencer en Ferraz para batirse con garantías de éxito con el popular Jorge Azcón si éste repite como alcaldable. En pocos días, comprobaremos si hay sorpresas de última hora en las primarias socialistas.
¿De qué va a depender que Azcón continúe en la Plaza del Pilar o por el contrario decida batirse en duelo por el trono del Pignatelli? Dependerá de la evolución de las encuestas, las publicadas hasta ahora son favorables al PP, y muy probablemente también de los movimientos que realice el PSOE en la designación de sus candidatos. Azcón, a quien Feijóo le habría dado libertad para decidir su futuro, mira de reojo al PSOE mientras no oculta que se gusta en el papel de alcalde de Zaragoza (¡cómo se desmelenó en el reciente Viva Latino!) y que le encantaría seguir cortando cintas y besando a los vecinos con ese aire juvenil y tan cercano.
El resto de partidos tampoco han concretado a estas alturas sus cabezas de lista. Solo se sabe que repetirá José Luis Soro en CHA, pero no hay noticias sobre si Arturo Aliaga optará de nuevo al frente de un PAR en horas bajas. En Ciudadanos, la revolución interna sigue sin sofocarse y no están para hablar de candidatos. Y a la izquierda del PSOE, como ya es tradición, se ha instalado la indefinición y la falta de unidad. Sobrevuelan las incógnitas sobre Podemos, Izquierda Unida y el ultimo invitado que se ha sumado a esta abundante y diversa tarta electoral, Aragón Existe. A nueve meses para la cita con las urnas, todavía hay muchos cabos sueltos.