El curso político se reanuda esta semana en Aragón con el órdago lanzado en pleno verano por el presidente Jorge Azcón y que, hay que decirlo, viene cargado de cierto tufillo a excusa para convocar elecciones anticipadas en 2026, un año antes de lo legalmente establecido. Azcón, hábil estratega que sigue a pie juntillas las directrices que marca Génova, ha llegado al ecuador de la legislatura realizando un anuncio sorprendente: se ha comprometido a presentar en las Cortes los presupuestos de 2026. Sería lo normal, y lo legal, si no hubiera renunciado antes a aprobar las cifras de 2025 porque no tiene los poyos parlamentarios suficientes para sacarlas adelante. El PP de Azcón esta en minoría desde la espantá de su exsocio Vox hace algo más de un año.
Cabe preguntarse: ¿Qué ha cambiado para que en esta ocasión sí se proponga llevar los presupuestos a las Cortes y buscar el apoyo imprescindible de Vox? Más bien nada. En el ultimo año, Azcón ha estado maniatado en las Cortes. No ha logrado aprobar el presupuesto y ni una sola ley debido a su extrema debilidad parlamentaria. En los últimos meses, VOX y Azcón han acentuado su divorcio y no parece que la relación vaya a mejorar a medida que nos acercamos al final de la legislatura. Por otro lado, es evidente que Azcón ni se plantea mirar a su izquierda para sacar las cuentas.

Jorge Azcón saluda a Alberto Núñez Feijóo en un acto del PP en Zaragoza.
En este punto, no es ni mucho menos descabellado pensar que en la segunda parte de la legislatura la estrategia diseñada por Alberto Núñez Feijóo pase por propiciar una situación de bloqueo que lleve a la convocatoria de elecciones anticipadas en aquellos territorios donde el PP gobierna en minoría tras la ruptura con Vox, es decir, Comunitat Valenciana, Extremadura, Murcia, Aragón, Castilla y León y Baleares. El PP quiere aprovechar el viento favorable de cola de las encuestas, que en Aragón sitúan a Azcón al borde de la mayoría absoluta, y aumentar la presión sobre Pedro Sánchez. Una vez más, la política aragonesa se somete a las directrices marcadas desde Madrid DF.

