Han sonado las campanadas de Fin de Año y ha llegado la hora de la verdad para el Gobierno PP-VOX de Jorge Azcón. PP y VOX navegan juntos y no parece que la ola provocada por la enésima polémica del trasvase del Ebro les vaya a engullir, al menos por ahora. No importa que VOX defienda abiertamente una política hidráulica trasvasista. Se mira hacia otro lado y si es mucha la presión se organiza un viaje de vacaciones de una semana al otro lado del charco, a Puerto Rico, en compañía del constructor de cabecera, Juan Forcén y sus familias.