Tarazona está siendo mi medicina para pasar estos días de aislamiento. Por suerte, estoy realizando el confinamiento en casa con mis padres y mi perrita, Luna, que, por cierto, está siendo la más beneficiada… hacía tiempo que no pasábamos tantas horas juntas.
Todos los días estoy en contacto con el Ayuntamiento para informarme y conocer cuál es el estado actual del Covid-19 en la ciudad así como de su evolución. Si de por sí esta situación está siendo muy dura, no os podéis imaginar cómo se multiplica en el mundo rural… Allí todos/as nos conocemos, desde el personal auxiliar/ sanitario, a los/as dependientes y cajeros/as de los supermercados y, por desgracia, hasta los enfermos/as… El resto de mi jornada la paso leyendo, preparando nuevas propuestas y enmiendas a los presupuestos de 2020 de la ciudad, escuchando la radio, viendo series y películas, pero, sobre todo, haciendo ejercicio prácticamente todos los días. Es mi momento preferido del día. Bueno, ése y las vídeollamadas con amigos/as y familiares que se convierten en una importante dosis de esperanza y cariño.
Estamos atravesando una situación excepcional, y, por ello, tenemos que sacar lo mejor de todos/as y cada uno /a de nosotros/as. Y, en Tarazona, lo hemos entendido a la primera. Tenia super claro que Tarazona es absolutamente solidaria, pero con el paso de los días me estoy emocionando más si cabe de la grandeza de todos/as sus vecinos/as.
Entre todos y todas, siendo responsables y quedándonos en casa, lo vamos a lograr, y, vamos a ganar la batalla más pronto que tarde al covid-19. ¡ Mucho ánimo!